La restauración, enmarcada en el programa regional ‘Arquimilenios’ de la Consejería de Fomento, ha incluido cubiertas, cornisas y fachadas.

másMedina.- Algunas obras de detalle continuarán dos meses más para concluir la intervención, pero los andamios se retirarán antes de Semana Santa y la nave central de la Iglesia de San Miguel acogerá los actos litúrgicos del programa. Así lo aseguró ayer el arquitecto encargado de las obras de rehabilitación del Templo, Mauricio Rodríguez.

La intervención ha incluido la rehabilitación de cubiertas y cornisas, el cerramiento del campanario para obstaculizar el anidamiento de palomas y la rehabilitación superficial de fachadas. Estas últimas necesitarán, a juicio del técnico, una posterior intervención más en profundidad.

El secretario general de la Consejería de Fomento, Julio Carnero, visitó durante la mañana el templo medinense acompañado del delegado territorial de la Junta, Mariano Gredilla y el alcalde de la localidad, Crescencio Martín Pascual, además de numerosos ediles de la Corporación municipal.

Carnero recordó que la intervención se enmarca en el programa «Arquimilenios» de la Junta de Castilla y León, que persigue rehabilitar monumentos singulares de todo el territorio de la Comunidad y ayudar así a que los pueblos y las ciudades «sean espacios más habitables y se pueda contribuir con ello a luchar contra la despoblación».

Carnero se comprometió durante la visita a «estudiar» la inclusión de una segunda intervención para San Miguel en el nuevo programa Arquimilenios destinado a la presente legislatura, que se presentará en el segundo semestre del año. Durante la legislatura pasada, el programa Arquimilenios llevó a cabo once intervenciones por cada provincia castellana y leonesa, por un importe global de más de 50 millones de euros.

Intervención en la Iglesia de Santo Tomás

Martín Pascual aprovechó la visita del secretario general de Fomento para entregarle un proyecto de intervención en otro templo medinense, la Iglesia de Santo Tomás, que el año pasado sufrió en sus cubiertas las consecuencias de una copiosa tormenta. El Consistorio se hizo cargo de una partida presupuestaria para acometer obras de urgencia.

El proyecto contempla actuaciones que alcanzan los 500.000 euros. El párroco de Santo Tomás, José Manuel Tabera, que también estuvo presente en la visita a las obras de San Miguel, valoró como «más urgente» la cubierta de la torre, que quedó «totalmente desmantelada» tras la tormenta hace más de un año. También la cubierta de la nave principal y «otras reformas de la parte interior del edificio».

Precisamente la cubierta del campanario será objeto de restauración el próximo mes, con un coste de 41.000 euros: De ellos, 23.000 los aportará la Diputación Provincial y 12.000 el Arzobispado. Los 6.000 euros restantes saldrán de la propia parroquia. Carnero aseguró ayer que Fomento estudiará las necesidades de este templo para su posible inclusión en Arquimilenios.